Escuela de Violeros (AC Muslyramus)

La Escuela de Violeros (AC Muslyramus) está comprometida con la investigación, preservación y divulgación del rico legado cultural de la violería ibérica. Imparte también cursos de formación en la construcción de instrumentos antiguos (vihuela de mano, vihuela de arco, guitarra renacentista, guitarra barroca, laúdes ibéricos, arpas ibéricas, viola da gamba) y guitarra española. Tiene su sede en la ciudad de Zaragoza, pero desarrolla actividades en todo el territorio nacional y colabora con museos e instituciones culturales.

El proyecto surgió partir de diferentes experiencias previas desarrolladas en años precedentes en colaboración con importantes museos e instituciones culturales (Ministerio de Cultura, Departamento de Cultura del Gobierno d Aragón y Comarca de la Sierra d Albaracín. Entre ellas, merece reseñar los proyectos Musas, Música, Museos; o Joven Música Antigua, con actividades en el Museo Nacional de Escultura. Museo Lázaro Galdiano, Museo Sefardí, Museo de Santa Cruz de Toledo, Museo de Bellas Artes de Valencia. Museo de Zaragoza y Museo de la Trashumancia de Guadalaviar.

Desarrolla ciclos formativos completos de varios años de duración que permiten a los alumnos profesionalizarse, pero también incluye cursos de media o corta duración dirigidos a la especialización, en algunos casos, y a la iniciación, en otros. También programa cursillos monográficos en diferentes materias relacionadas con la violería: lacería, taraceado, tratamiento de superficies, restauración de instrumentos musicales, confección de cuerdas de tripa, etc.

Ocupa un espacio no atendido por las enseñanzas oficiales, que no incluyen estas especialidades y, desde su inicio, ha recibido alumnos procedentes de diferentes países, interesados en la especialización en las técnicas antiguas del Arte de la Violería.
Contribuye a la recuperación de patrimonio organológico mediante la aplicación de un método científico. Una propuesta respetuosa con los procedimientos artesanales antiguos y con la personalidad artística de aquellos delicados instrumentos. A partir de las investigaciones desarrolladas por musicólogos, organólogos y violeros, de acuerdo a métodos científicos, se interesa por la recuperación de las arquitecturas, morfologías, ornamentaciones y materiales históricos con el máximo rigor.

Desde su inicio, en coherencia con los planteamientos y la filosofía de su principal patrocinador, la Fundación Daniel@Nina Carasso, la Escuela de Violeros, también llamada Escuela de Violería, se ha comprometido con la inserción profesional y la integración cultural de colectivos en riesgo de exclusión y personas con diferentes discapacidades. Fruto de este espíritu surgieron proyectos tan ilusionantes como el “Ratatranta”, de amplia difusión internacional, o el taller para la profesionalización en la confección de cuerdas de tripa.

Se constituyó en el ejercicio 2014 gracias a la iniciativa de la Asociación Cultural Muslyramus y al apoyo inicial prestado por la Fundación Daniel@Nina Carasso, en un contexto, Aragón, en el que la violería fue una de las artes mayores durante la Edad Media y el Renacimiento, de ahí su permanente apuesta por conseguir un mayor apoyo institucional en el intento de reivindicar la importancia del legado de los violeros zaragozanos, un activo cultural de enorme importancia, reconocido internacionalmente.

Su estructura recibe también apoyos por parte de la Diputación Provincial de Zaragoza y establece colaboraciones puntuales con el Ayuntamiento de Zaragoza y otras instituciones para gestionar proyectos de dinamización y reivindicación cultural.